El apiñamiento es una situación que se suele ver muchos en pacientes de clínicas dentales. Consiste en un problema de posicionamiento de los dientes cuando no hay suficiente espacio, concretamente en los huesos maxilares, para albergar todas las piezas dentales provocando que los dientes se monten entren ellos.
El apiñamiento es muy común en los niños a partir de 6 años cuando los dientes de leche caen para dejar espacio a los definitivos, aunque, también es frecuente ver a adultos con dientes así por no haberlo solucionado antes o por otros factores. Este apiñamiento puede afectar a cualquier diente, pero lo más frecuente es que se de en los incisivos inferiores.
Aunque le motivo más frecuente por el que los dientes se apiñan es por la falta de espacio, existen algunas otras causas:
- Factores genéticos: la genética juega un papel fundamental en el desarrollo bucodental (mandíbula demasiado pequeña, dientes demasiado grandes…)
- Caída prematura de los dientes: los niños que pierden antes lo dientes son más propensos a tener falta de espacio.
- Uso prolongado de chupete durante la infancia: esto causa problemas de mal oclusión.
- Falta de aparatos de retención: personas que en el pasado llevaron ortodoncia y no utilizaron los retenedores de forma correcta.
- Erupción de muelas del juicio: suelen salir en personas adultas que ya cuentan con toda la dentición definitiva provocando desplazamientos en otras piezas dentales por buscar su propio hueco.
- Dientes supernumerarios.
- Hábitos linguales
- Perdida o ausencia de dientes
El tener los dientes apiñados tiene sus riesgos. Provoca problemas de higiene dental, es más difícil acceder a todas las zonas de la dentadura con un cepillo de dientes u otros, lo cual provoca que las bacterias se acumulen y desarrolle determinadas patologías orales como caries, gingivitis o periodontitis.
Por supuesto, también provoca problemas estéticos, que además irán a peor a medida que el apiñamiento evolucione puesto que, al no tener una alineación y posición correcta se producen contactos inadecuados y las cargas en la masticación o el bruxismo, no se reparten entre los dientes contiguos de la misma forma o con la misma intensidad, dando lugar a desplazamientos dentales y otros problemas más graves, así como tensión y dolor en la mandíbula. El apiñamiento ocasiona problemas de tipo emocional o psicológico: menor autoestima, vergüenza al sonreir, etc.
El apiñamiento tiene diferentes soluciones para tratarlo dependiendo del caso concreto de cada paciente. Su dentista explorara su caso llegando a optar por la opción necesaria.
Normalmente, los casos de apiñamiento dental se solucionan mediante un tratamiento de ortodoncia que finalizara con unos retenedores, y ayudara a alinear su estructura dental de una forma correcta y saludable. Sí que es verdad, que hay casos en los que la única solución sea la extracción dental de alguna pieza porque se ha encontrado con erupciones dentales en posiciones erróneas.
En Sé Tú Clínica tenemos una amplia experiencia en las ortodoncias no solo en adultos sino también en la de nuestros hijos. Contamos con un equipo de especialistas que le ofrecerán un cuidado completo y de primera calidad.